Encuentro de diputados nacionales con genocidas presos en la cárcel de Ezeiza
Seis diputados nacionales de La Libertad Avanza (LLA) visitaron el último jueves el penal federal de Ezeiza y se reunieron con represores detenidos por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar. Se trata de Beltrán Benedit, Lourdes Arrieta, Guillermo Montenegro, Rocío Bonacci, Alida Ferreyra y María Fernanda Araujo, quienes mantuvieron un encuentro con los genocidas Alfredo Astiz, Raúl Guglielminetti, Adolfo Donda, Antonio Pernías, Gerardo Arráez, el “Pájaro” Martínez Ruíz, Agustín Oyarzábal Navarro, Juan Manuel Cordero, Mario “el Cura” Marcote y Miguel Angel Britos.
La visita, según fundamentó el entrerriano Beltrán Benedit, impulsor del encuentro, fue a “excombatientes que libraron batallas contra la subversión marxista por orden de un gobierno constitucional”.
El asunto es que los seis legisladores nacionales solicitaron una combi de la Cámara de Diputados, tal cual reveló LPO.
El titular de la Cámara recalcó que “no tuvo nada que ver” con esa actividad, que los seis diputados fueron “a título personal” y que él no estaba al tanto del tour.
Además, avisaron en el grupo de WhatsApp del bloque de La Libertad Avanza que harían una “visita humanitaria”. El riojano, aseguran en su entorno, jamás vio esa convocatoria en el chat.
Cuando la visita se hizo pública en La Política On-line, Benedit escribió en ese chat: “¿Les duele la visita humanitaria? Sí. ¿Las Fuerzas Armadas vencieron al terrorismo marxista por las armas? Sí”. Y remató: “¿El Presidente combate en la política esta ideología? Sí”.
“¿Qué edad tenían estos presos al momento que se le inventan los cargos? Entre 19 y 23 años. ¿Los cargos han sido probados? No, muchos son inventados”, señala uno de los fragmentos. Y subraya: “Vamos a hacer un escrito que dirá que no se cumplen los derechos humanos porque quienes fueron parte (terroristas) hoy se erigen en jueces y fallan en función de la venganza, la ideología y el negocio”.
En tanto, Arrieta, también conocida como “dipupato”, por usar patitos kawaii en la cabeza, y que, dicho sea de paso es la elegida por Karina Milei y Martín Menem para armar el partido de La Libertad Avanza en Mendoza, también justificó su visita al penal de Ezeiza.
“Señores, tengo 31 años y quiero saber la verdad de primera mano, que no me la cuenten como nos la contaron durante 20 años”, escribió la mendocina en el chat del bloque libertario.
La diputada Rocío Bonacci, aseguran fuentes parlamentarias, asistió “engañada” a la cárcel de Ezeiza. Pensó que verían las condiciones en la que viven los presos, y no a visitar a represores.
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