Ante reclamos de vecinos, piden cambios al Código Urbanístico sobre la traza de una calle de Caballito
Los legisladores radicales Lucio Lapeña y Guillermo Suárez presentaron un proyecto de Ley para modificar el Código Urbanístico, eliminando a la calle Del Barco Centenera “de la nómina de vías con línea de edificación particularizada”.
La Legislatura porteña recientemente votó la media sanción de una serie de ajustes al Código Urbanístico. El 6 de noviembre se celebrará la Audiencia Pública correspondiente y el texto final puede incorporar más modificaciones, tales como las que solicitan ahora los representantes de UCR-Evolución.
El texto parlamentario propone eliminar del punto 5.4. “Vías con L. E. Particularizadas. Cuadro N° 5.4” del Código Urbanístico a los tramos de la calle Del Barco Centenera comprendido entre la Av. Juan Bautista Alberdi y Av. Pedro Goyena y entre José Bonifacio y Av. Asamblea.
“Por otro lado, también se propone eliminar del punto 5.5. “Vías con afectaciones a aperturas o ensanches, del cuadro N° 5.5.a2 Arterias afectadas a ensanche con declaración de utilidad pública y sujeción a expropiación de las parcelas o partes necesarias a aquellos fines del Código Urbanístico, los tramos de la calle Del Barco Centenera comprendido entre la Av. Rivadavia y la Av. Juan Bautista Alberdi y entre la Av. Pedro Goyena y José Bonifacio”, explica la defensa del texto firmado por los representantes radicales.
“Esto resulta una demanda ciudadana desde hace años que se ven afectados en la circulación diaria. Las Ordenanzas 23.475/68 y la 35.161/79 que, a partir de la sustitución del punto 6.1.2 del antiguo Código de Planeamiento Urbano, dispusieron la ampliación del ancho del tramo de la calle Del Barco Centenera comprendido entre la Avenida Alberdi y la Avenida Asamblea, a un total de treinta metros”, detallan los radicales.
“El supuesto objetivo de esa modificación era convertir a la arteria en una avenida capaz de mejorar la conexión de la zona centro de la ciudad, unificando la Avenida Honorio Pueyrredón que debería terminar en la zona de Primera Junta y de allí terminar la conexión con la Avenida Sáenz, para conectar con el puente Ezequiel Demonty, sin tener en cuenta el impacto que se daba en los vecinos a los largo de los distintos cambios que va realizando la traza de la calle”, ejemplifican.
“El actual contexto genera graves perjuicios a todos aquellos titulares de las viviendas ubicadas sobre ella, que se traduce tanto en una desvalorización de las propiedades como en la imposibilidad de regularizar las reformas realizadas en contravención a la misma”, concluyen los legisladores porteños de UCR-Evolución.
Juan Pablo