Cooperativa de Editores de Medios de Buenos Aires
Cooperativa Editores de Medios BA

Refrigeradores sin electricidad

Están fabricando en diferentes partes del mundo refrigeradores de arcilla que no usan electricidad ofreciendo así una posibilidad ecológica y accesible para mantener fríos los alimentos.

El recipiente de la primera imagen, 100% ecológico, está hecho de barro y arena, puede según sus diseñadores, mantener temperaturas de hasta -8ºC sin necesidad de tener conexión eléctrica. El equipo creado para comunidades de escasos recursos donde no tienen fluido eléctrico es elaborado por la empresa mexicana Depresa. Otra es Ecoplanet. Parece una maceta grande que contiene otra menor adentro, separados por una gruesa capa de arena y tierra. El equipo se deja a media sombra y cuando el agua en la capa de arena y tierra se evapora, la temperatura del recipiente desciende, lo que permite que se tengan alimentos más frescos y conservados explican en Portal-ambiental.
Los productos de Depresa se comercializan desde 2015 y recientemente autoridades gubernamentales los han incluido entre su plan de desarrollo social y público dentro de comunidades necesitadas que viven en zonas rurales.
Entre los dos contenedores se coloca una mezcla húmeda de arena, grava, granzol, marmolina y tierra. Después es colocado a media sombra permitiendo que los rayos ultravioleta hagan contacto indirectamente en él. Al evaporarse el agua de la mezcla, el proceso permite que el calor de los alimentos dentro del enfriador sea extraído. Es decir, la reacción de evaporar el agua de la mezcla requiere energía que se toma del calor de los alimentos y los enfría.
Iniciativas como esta se han visto en todo el mundo, el artesano Mansukhbai Prajapati de la India, ha desarrollado un refrigerador que tampoco necesita electricidad, idea que le surgió al estar atravesando una difícil crisis financiera.
Su equipo es conocido como MittiCool, y explica que mantiene la comida fresca durante casi tres días, gracias a su cámara de agua. El agua corre por los lados de la pared de cerámica, que tiene cuatro tipos de arcilla, a la que le adaptó un grifo para que se filtre el agua y así también se pueda beber.