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El cuidado de presos en las comisarías disminuye la presencia policial en las calles

En el marco de un encuentro mantenido con vecinos de Las Mil Casitas, el comisario Sergio Rodríguez, encargado de la seguridad del barrio de Liniers, alertó sobre la falta de efectivos en su dependencia, muchos de los cuales tienen a su cargo el control de los detenidos. Tras el encuentro, los vecinos presentes elaboraron una nota que próximamente presentarán ante el Ministerio de Seguridad, exigiendo una mayor dotación de personal policial en la seccional de Liniers, dedicada exclusivamente al cuidado de las calles del barrio.

En la tardenoche de ayer, el comisario Sergio Rodríguez, titular de la Seccional 9B, que tiene a su cargo la seguridad del barrio de Liniers, se reunió con más de medio centenar de vecinos de Las Mil Casitas en la sede del club Liniers, de Palmar y Montiel, para escuchar sus demandas e intentar aportar soluciones ante los reiterados hechos de inseguridad que en los últimos meses se vienen repitiendo en la zona.

El encuentro se gestó hace algunos días, a raíz del reclamo de varios vecinos preocupados por la escasez de presencia policial en un amplio sector del barrio de Liniers. “Han retirado la vigilancia policial, ya no se ven vigilantes caminando la zona y las patrullas no tienen frecuencia”, coinciden en afirmar. Y además sostienen que, en los últimos meses se vienen repitiendo casos de “robos de cubiertas de vehículos y de teléfonos celulares” e incluso “intentos de entraderas, como nunca se vieron en el barrio”. En ese sentido, algunos sostienen que “parece zona liberada entre General Paz y Timoteo Gordillo desde Ramón Falcón hasta Boquerón. De hecho, en el sector aledaño a la plaza Sarmiento ya no se puede caminar tranquilo”.

Esos mismos reclamos se hicieron públicos en la reunión, donde varios vecinos expresaron su preocupación frente al comisario Rodríguez que -una vez más- se prestó amablemente al diálogo. Ante el pedido de una mayor presencia policial en la zona, el titular de la Seccional 9B -que funciona en el bajoautopista de Juan B. Justo y Gana, sobre el límite noroeste de la Comuna 9- sostuvo que no cuenta con el personal necesario como para dar una respuesta concreta al pedido de los vecinos. Y argumentó que varios de los efectivos de la comisaría están asignados al cuidado de los detenidos. No obstante, enfatizó que periódicamente eleva esos reclamos al Ministerio de Seguridad, pero que a la fecha no le han asignado más recursos.

A su turno, una vecina expresó que en las cercanías de la plaza Sarmiento son comunes las entraderas de gente que ingresa a las casas por los techos, aprovechando que no se observan policías de ronda. “Tampoco se ven guardianes de senderos seguros a la entrada y la salida de los colegios de la zona, y muchos chicos vienen siendo víctimas de robo de teléfonos celulares”, destacó otro vecino.

Vale recordar que hacia fines del año pasado cerca de sesenta vecinos habían presentado un reclamo formal por escrito en el Ministerio de Seguridad, exigiendo mayor presencia policial y la colocación de más cámaras de seguridad en la vía pública, especialmente en la zona de los pasajes. En ese sentido, tras el encuentro con el comisario, los presentes se comprometieron a presentar otra nota similar con el apoyo de nuevos vecinos, porque, recalcaron que “la situación es grave”.

En la entrevista que Cosas de Barrio le realizara hace dos años, poco después de asumir al frente de la Seccional 9B, el comisario Rodríguez especificó que contaba con 420 efectivos, diez patrulleros recorriendo las calles en forma permanente, seis motos (cuatro por la mañana y dos por la tarde) “hacen falta más motos” -había dicho por entonces- y cuatro bicicletas que recorren la entrada y salida de los colegios (dos por la mañana y dos por la tarde). Y como para subrayar la importancia de los efectivos en las calles, expresó “siempre trato de que la presencia policial se note, porque eso desestima el accionar delictivo. Si hay un policía cerca, el delincuente lo va a pensar dos veces antes de actuar”.

Hoy, sin embargo, la seccional cuenta con muchos menos recursos que entonces y, en contraposición, los hechos delictivos marcan una tendencia en alza.

“En los últimos tiempos se incrementó la cantidad de celadores para la custodia de detenidos y eso, de alguna manera, incide en la escasez de presencia policial en las calles”, explicó en la charla el comisario, y reafirmó su compromiso. “Lo importante es escuchar los problemas de los vecinos y trabajar al respecto, porque ustedes nos manifiestan los hechos que ocurren en la zona donde viven y nosotros, en base a eso, trabajamos en la prevención”. En ese sentido, anticipó que espera contar con más efectivos en los próximos meses, que le permitan cubrir con presencia policial todo ese amplio sector del barrio.

Durante el encuentro se reclamó también por el incremento de la venta ilegal y la comercialización de productos comestibles en la vía pública -sin ningún tipo de control bromatológico- sobre José León Suárez y Ramón Falcón, e inmediaciones. “Eso además genera mucha suciedad y la proliferación de roedores”, enfatizaron los vecinos.

El encuentro estuvo coordinado por el juntista de la Comuna 9, Alberto Espiño, mientras que su par, Lorena Crespo, se encargó de elaborar el acta de la reunión. También se hizo presente Juan José Cháves, otro de los integrantes de la Junta Comunal 9, por el Frente de Todos.

En un tramo del acta que sintetizó el encuentro puede leerse: “luego de haber planteado numerosos problemas de inseguridad en el barrio de Liniers, en reunión vecinal junto al comisario de la Seccional 9B, solicitamos al Ministerio de Seguridad la incorporación de efectivos en dicha comisaría”. Y más adelante el texto elaborado de puño y letra y refrendado con las firmas de los vecinos presentes, puntualiza “solicitamos que no se utilicen las comisarías para albergar detenidos en espacios no acondicionados para eso, con personal no adecuado, ya que resulta peligroso para policías y vecinos y redunda en fugas indeseadas, además de insumir personal, que debería estar abocado al cuidado de las calles del barrio”.

Sobre el final del encuentro, el comisario se comprometió a redoblar esfuerzos en post de canalizar el reclamo de los vecinos, y aseguró su presencia en una próxima reunión a realizarse en treinta días, para evaluar los avances que se puedan lograr en lo inmediato.