El Torito se comió al Tiburón y es líder aboluto
Por la 31ª fecha del Campeonato de la Primera Nacional, Nueva Chicago venció por 2 a 1 a Aldosivi en Mataderos. Stefano Callegari y Facundo Castro fueron los autores de los goles que dejaron al Torito en soledad en la punta. Mientras que, por la fecha 13ª del Torneo Clausura de la B Metropolitana, Liniers venció como local a Villa Dálmine por la mínima. En esta nota, todos los detalles.
En la tarde del sábado, con el marco de un República de Mataderos colmado y vibrante, Nueva Chicago se jugaba más que tres puntos: la chance de quedar como único líder del torneo. Enfrente, Aldosivi, que también luchaba en lo más alto de la tabla. El ambiente era inmejorable, y el equipo no decepcionó.
El partido no podía haber comenzado de mejor manera para el Torito. Apenas habían transcurrido cuatro minutos cuando Stefano Callegari, exjugador de Aldosivi, se encargó de romper el cero y revalidar la famosa “ley del ex”. En una acción rápida y letal, se adelantó a todos, cabeceó solo bajo el arco y convirtió el primero de la tarde, desatando la euforia en las tribunas que todavía se acomodaban. La sorpresa y la euforia se mezclaron mientras el defensor celebraba junto al equipo, dejando claro que, en este duelo crucial, Chicago estaba dispuesto a todo desde el primer instante.
El gol tempranero le dio al verdinegro el impulso para seguir dominando el juego. Aldosivi, desorientado, sufrió el dominio del equipo de Montenegro, que buscó ampliar la ventaja sin suerte. Facundo Castro fue el más insistente, avisando en varias oportunidades, pero la definición esquiva y una sólida actuación del arquero rival mantuvieron el 1 a 0 hasta el final de la primera mitad.
En el complemento, el trámite cambió. Aldosivi salió con otra actitud y sorprendió a Chicago. A los 2’, Agustín Colazo ganó en lo alto y, con un cabezazo certero, puso el empate, durmiendo al Torito. El gol fue un balde de agua fría para Chicago, que debía volver a empezar de cero.
Pero si algo caracteriza a este equipo es su espíritu de lucha. Tras el empate, Chicago volvió a tomar el control del partido y generó varias situaciones claras de gol. Castro y Maximiliano Amarfil estuvieron a centímetros de volver a poner en ventaja al local, pero el travesaño y los palos se interpusieron en el camino. Parecía que el destino les negaba el triunfo, sin embargo, el fútbol siempre da revancha, y esta vez llegó para Castro. Cuando el partido se encaminaba a un empate clavado, el delantero recuperó en una mala entrega y sacó un disparo desde afuera del área que se clavó contra un palo, para sellar el 2 a 1 definitivo con un golazo que hizo estallar a Mataderos y aseguró una victoria clave para el Torito.
Con este triunfo, Nueva Chicago se afianza como líder solitario de la Zona B del torneo con 54 puntos, dando un paso firme hacia el objetivo del ascenso. La entrega del equipo y el aliento incansable de su gente fueron los pilares de una victoria que vale mucho más que tres puntos. En la próxima fecha, el verdinegro visitará a Mitre de Santiago del Estero -que le sacó un empate a Gimnasia de Mendoza y lo privó de ser puntero junto al Torito- el domingo desde las 16. Mientras, el sueño sigue intacto y en Mataderos ya se ilusionan con poder volver a Primera.
La Topadora ganó con lo justo
Por la fecha 13ª Liniers recibió en la tarde de ayer a Villa Dálmine en el estadio Juan Antonio Arias y logró una ajustada victoria por la mínima que le permitió quedarse con tres puntos vitales en la lucha por el torneo.
El primer tiempo fue de trámite parejo, sin un claro dominador. Aunque Liniers intentó adelantarse en el marcador, sus ataques no fueron lo suficientemente efectivos para romper el cero. Tanto Rodrigo Dimotta como Matías Linas buscaron el gol, pero los de Campana les cerraron el camino.
La historia cambió a los 8’ del segundo tiempo, cuando Sebastián Martínez, con un pase largo desde la defensa, encontró a Linas, quien mostró toda su habilidad al deshacerse de los defensores rivales y filtró un pase preciso para Nazareno Pompei, éste no perdonó y convirtió el único gol de la tarde. Villa Dálmine no bajó los brazos tras el gol y presionó en busca del empate. Sin embargo, Hugo Acevedo estaba en modo Topadora y respondió cada vez que fue exigido, salvando varias situaciones peligrosas que podrían haber igualado el marcador.
En los minutos finales, Liniers tuvo la oportunidad de sentenciar el encuentro. Carlos Di Prieto remató al arco y Martín Perafán atajó dejando un rebote manso en el área chica, donde Ignacio Sallaberry intentó empujarla al gol, pero su disparo se frenó en el palo, manteniendo el suspenso hasta el final del partido. Aunque no fue un triunfo fácil, el Celeste supo aprovechar la oportunidad y defender la ventaja hasta el último minuto.
Con esta victoria, la Topadora sumó tres puntos valiosos en su camino, para ubicarse ahora en la sexta posición con 20 puntos y alejándose de la zona baja en la tabla anual. Por la próxima fecha, Liniers recibirá a Argentino de Merlo, en día y horario a confirmar.
Micaela Ailup