Rechazo a la nueva represión a jubilados frente al Congreso
Por segunda semana consecutiva, las fuerzas federales a cargo de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich reprimieron a jubilados y partidos políticos que protestaban frente al Congreso de la Nación, en Balvanera, en contra del veto a la Ley de movilidad jubilatoria que impulsó la oposición.
Legisladores de Unión por la Patria presentaron un proyecto de Declaración en repudio: “La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires manifiesta su preocupación y expresa su profundo repudio por la violenta represión ejercida por parte de la Policía Federal Argentina , Gendarmería Nacional y Prefectura a Personas Mayores y manifestantes que se encontraban el 4 de septiembre de 2024, en las inmediaciones del Congreso de la Nación, en el marco de la movilización en rechazo al veto presidencial a la ley aprobada en ambas Cámaras y exigiendo una verdadera recomposición de los haberes jubilatorios”.
La legisladora Celeste Fierro (Frente de Izquierda) también presentó una declaración: “La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires repudia enérgicamente la represión y las provocaciones el día 4 de septiembre del año corriente, en las inmediaciones del Congreso de la Nación, por parte de fuerzas de seguridad nacionales contra jubilados en el marco de la concentración contra el veto de Javier Milei a la Ley de Movilidad Jubilatoria. Asimismo, exige al jefe de gobierno que haga respetar la autonomía de la Ciudad y garantice el pleno derecho democrático y constitucional de la ciudadanía a manifestarse y peticionar ante las autoridades”.
Ese miércoles 4 de septiembre hubo unos 40 heridos y dos detenidos, según reportó la Comisión Provincial de la Memoria. Se supo que al menos dos personas fueron trasladadas al Hospital Ramos Mejía, también ubicado en Balvanera.
“Los empujones a los manifestantes empezaron minutos antes de las 16 en Rivadavia y Combate de los Pozos. Unos instantes más tarde, los efectivos de las fuerzas de seguridad rociaron con gases lacrimógenos a los protestantes, quienes no incumplían con el protocolo anti piquete, ya que los mismos permanecían sobre la calzada, permitiendo la circulación vehicular con normalidad”, señala la defensa del proyecto de declaración de UP.
“Entendemos que tamaña agresión por parte de las fuerzas de seguridad va en contra, no solo de nuestra Constitución, sino además de los principios que todo ser humano tiene como ciudadanos. Cabe preguntarse entonces si existe algún límite: agredir de esta manera a nuestras personas mayores, es una clara desproporcionalidad en la represión en sí misma y en los medios utilizados contra este sector vulnerable de nuestra sociedad”, agrega.
Juan Castro