Del tango a la escultura: nuevos homenajeados
Fueron presentados varios proyectos con homenajes a artistas de distinto tipo, a fin de reconocer el impacto de su obra en la comunidad porteña.
Uno de ellos, con la firma de Franco Vitali (Frente de Todos), pide declarar de interés para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en el ámbito de la comunicación social y la cultura al libro “Desde el recuerdo los vuelvo a ver: semblanzas tangueras”, de la autora Paulina Spinoso, publicado por Editorial Ciccus.
El germen de este libro son las publicaciones en Facebook que realizaban desde el grupo “Efemeridianas” Paulina Spinoso, junto a Delia Aloisio y Silvia Salvadores, de Efemérides con motivo del aniversario del nacimiento o muerte de artistas del tango, explica Vitali.
Su autora, Paulina Spinoso, es profesora de filosofía, licenciada en psicología, psicoanalista y especialista en docencia superior. Además, es profesora de tango y milonguera. En los espectáculos del Grupo de Tango (años 90) presentó los trabajos: De las mujeres mejor no hay que hablar, Los juegos en el tango y Las pasiones en el tango (en colaboración). También los escritos: Enrique Santos Discépolo, una canción desesperada (en colaboración) y El tango como la soja de Buenos Aires. Como bailarina, en compañía de Alberto Dassieu, compartió exhibiciones y clases en Alemania, Suiza, Estados Unidos y Canadá. Actualmente, da clases junto a Marcelo Martinez con quien compartió clases y exhibiciones en Finlandia.
Paulina y sus compañeras integran la agrupación político-cultural Resistencia Milonguera que realiza y apoya actividades que propician la cultura nacional, especialmente, el tango.
Luego, Matías López (Vamos Juntos) presentó un proyecto para declarar Personalidad Destacada de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en el ámbito de la Cultura al artista Marcelo Chavez.
Chavez es un artista, escultor autodidacta, que nació en Puerto Iguazú y desde el año 1994 vive en el Barrio Fátima de Villa Soldati. Desde el año 2008 se dedica a reutilizar todo tipo de materiales que las personas descartan y realiza obras que ayudan a conservar y dar vida a espacios de uso común en el barrio.
Sus ejes prácticos son reutilizar, reorganizar y resignificar los materiales habitualmente en desuso o descartados. Los trabajos que produce ponen foco sobre objetos de la vida cotidiana, canalizando su lenguaje a través de esculturas e instalaciones con texturas, volúmenes y figuras de heterogéneos ámbitos e intereses, explica el texto de López.
“A la luz de la obra y actividades comentadas más arriba y de un trayectoria que se ha caracterizado por la constante motivación ambiental y social, resulta positiva la idea de que, una declaración de personalidad destacada de la cultura representaría, en este caso, ejemplar, en el reconocimiento de lo que el arte puede hacer, transformar y concretar en la realidad material de los vecinos de esta Ciudad”, concluye la defensa.
Juan Castro