Legislatura porteña: preocupa el vandalismo a la casa donde vivió Troilo
Días atrás fue vandalizada la casa que habitó el célebre bandoneonista Aníbal “Pichuco” Troilo, en en Soler 3280, a un paso del Abasto (catastralmente Recoleta, para la gente Barrio Norte). Tal situación generó que la legisladora Claudia Neira (Frente de Todos) presente un proyecto de Declaración en la Legislatura para expresar preocupación ante lo ocurrido. El inmueble está protegido por ley.
La Declaración propuesta por Neira, que luego deberá tratarse en el Recinto de sesiones: “La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires expresa su preocupación ante la vandalización a la que fue objeto la casa que habitó el célebre compositor y músico, Aníbal Troilo, sito en Soler 3280 de la Comuna 14. Asimismo, solicita al Gobierno de la Ciudad que arbitre los medios necesarios para la puesta en valor y restauración de la fachada, así como las medidas de seguridad para prevenir nuevos hechos de estas características”.
Los fundamentos: “Aníbal Carmelo Troilo, conocido también como “Pichuco”, fue un importante compositor y músico argentino. Reconocido hasta actualidad, el bandoneonista nacido un 11 de julio de 1914 de ascendencia italiana, ha alcanzado relevancia para el tango y la música popular de nuestro país. En el momento en el que recibió su primer bandoneón, a los 10 años de edad, Troilo comenzó un camino que rápidamente lo llevaría a dedicar su vida a la música. Desde aquél entonces, hasta el día de su fallecimiento, a los 60 años de edad, marcó la historia del tango como pocos”.
“En la casa de Soler, vivieron Felisa Bagnolo, madre del banoneonista, y su padre, homónimo del artista. En ese mismo lugar, también nació Marcos, el hermano mayor, y allí falleció su hermana, Concepción, lo que determinó que el matrimonio Troilo decidiera alquilar otra vivienda, en Cabrera 2937. Es en ese lugar nacería quien se transformó en uno de los íconos emblemáticos del tango y la música argentina. Sin embargo, más adelante, la familia regresó a la casa de la calle Soler a la que refiere este proyecto. Es en esta casa del barrio de Palermo en la que Troilo encontró su hogar, y donde buscó inspiración para componer alguna de sus grandes obras”.
“Días atrás la casa natal de nuestro artista fue encontrada vandalizada con pintura en aerosol, mancillando así un edificio que se encuentra declarado por esta Legislatura como sitio de interés histórico de la Ciudad (Ley N° 2476). El patrimonio de nuestra Ciudad debe ser resguardado, tomando todas las medidas necesarias para que la memoria y la cultura vivan en cada espacio de nuestra Ciudad. Hace un año atrás, debimos intervenir en un caso de similares características por el robo de una placa alegrórica al escritor Jorge L. Borges (Exp. N° 109-D-2020). El cuidado y protección del patrimonio cultural e intangible de una ciudad que vive y respira cultura es clave para construir la memoria y la identidad de nuestra porteñidad. Es indispensable que el Gobierno de la Ciudad efectúe las medidas necesarias para restaurar el sitio y disponga las medidas de seguridad necesarias a fin de prevenir nuevos hechos como el acontecido”, concluye el proyecto de Neira.
J.C.
Foto: Wall Street International Magazine