“A la escuela se va a estudiar”
La organización social La Boca Resiste y Propone (Lbrp) realizó una publicación en la fijó su postura con respeto a conflicto en las escuelas de la ciudad de Buenos Aires bajo el titulo “A la escuela se va a estudiar”.
En el escrito señala lo siguiente: “A la escuela se va a estudiar” y para ello niñas, niños y jóvenes, necesitan de condiciones de piso que permitan desarrollar las prácticas educativas.
En estas semanas distintos grupos de jóvenes de escuelas secundarias han llevado adelante una medida de lucha que consideran de MÁXIMA, que es la toma de sus colegios, como herramienta para instalar un conjunto de demandas que no fueron atendidas por parte del Ministerio de Educación a cargo de la Ministra Soledad Acuña.
Entre las demandas se plantean:
– Déficit en la infraestructura edilicia de los colegios.
– Necesidad de viandas suficientes, de calidad alimentaria y en condiciones de salubridad para aquellos alumnos que las requieran.
– Contratación de personal docente para cubrir las suplencias y así tener cubiertas todas las horas de clase.
– Control y regulación sobre las horas de aprendizaje en el mundo laboral, con tareas acorde a las instancias de formación y bajo supervisión de adultos responsables de las instituciones, con suspensión de aquellas tareas que reducen a la servidumbre.
– Restitución del Plan Sarmiento.
Las demandas son bien concretas, claras e incluso aquellos que no han sido formados en el ámbito pedagógico podrían entenderlas y atenderlas.
La Ministra Acuña se vuelve ineficiente cuando destina recursos Judiciales, a resolver asuntos que le son propios al Ejecutivo y a su Ministerio, lo que da cuenta a las claras una vez más que no se encuentra capacitada para la enorme tarea que se le ha asignado.
Desde hace algunos años la Ministra Acuña a olvidado el Capítulo 4to, de la Constitución de CABA, sobre todo el 2do párrafo, del art.24 que dice que la Ciudad:
“Organiza un sistema de educación administrado y fiscalizado por el Poder Ejecutivo que, conforme lo determine la ley de educación de la Ciudad, asegure la participación de la comunidad y la democratización en la toma de decisiones”.
La Ministra no puede desentenderse ya que la Constitución no es una carta de intenciones, sino una manda que la obliga entre otras cosas a dialogar con la comunidad educativa para definir el proyecto institucional y atender sus demandas.
Estas son algunas de las cuestiones por las que nos Resistimos a que Soledad Acuña continúe en su cargo como ministra y Proponemos su reemplazo por alguien formado en el ámbito pedagógico, con apego irrestricto a la manda Constitucional, que no priorice la campaña electoral a sus obligaciones de funcionaria, pero por sobre todo que sienta Amor por la Educación y la Comunidad Educativa, que incluye alumnes, docentes, familias y todo el personal. Ni un Halcón, ni una Paloma, con una Ministra de Educación alcanzaría.
Solidarios con su lucha! La Boca Resiste y Propone.