Muestra redescubre la labor social del artista Quinquela Martin
El gran artista de La Boca es abordado en esta muestra con una mirada que hace hincapié en su perspectiva social. Se trata de la muestra “Filantropía. Benito Quinquela Martín como transformador social” puede visitarse de lunes a viernes de 11 a 19 en El Obrador de Buenos Aires, Bartolomé Mitre 1670, con entrada libre y gratuita.
Conocido por sus obras sobre su querido barrio de la Baca en el Sur porteño, “Filantropía muestra a Benito Quinquela Martín como transformador social”, recupera desde lo documental en diálogo con algunas de sus obras, la figura del gran artista en tanto impulsor de una revolución social en uno de los barrios pobres y humildes del sur de la ciudad de Buenos Aires.
El barrio de origen obrero devenido en barrio turístico y romantizado en la actualidad, de profusos colores y obras públicas con su Caminito y veredas extrañas, donde el puerto, el Riachuelo y la inmigración de fines del siglo XIX y principios del pujante y moderno siglo XX con sus fábricas e idea de progreso configuraron el imaginario del artista, para luego ser volcado como impronta barrial.
La figura como “transformador social de su barrio” se manifiesta en “el material de archivo que guía el recorrido, siempre acompañado de su obra y las distintas materialidades con las que experimentó: grabados, óleos, cerámicas, dibujos y carbonillas”, tal como explica la curadora de la muestra Gabriela Vicente Irrazábal.
Benito Quinquela Martín (1890-1977) quedó huérfano y fue adoptado a los siete años por un matrimonio humilde de italianos y, habiendo ido sólo dos años a la escuela, tuvo que salir a trabajar en la carbonería de su padre adoptivo, Chinchella, hasta los 20 años.
El carbón lo llevará como autodidacta a empezar a dibujar, estudia con el pintor Alfredo Lazzari, y para 1918 tiene su primera muestra alcanzando reconocimiento en la década de 1920 lo que lo deja hacia los años 1930 en posición de impulsar su filantropía, cuenta a Télam la curadora.
Tal vez, esa experiencia de infancia y trabajo le marcaron un objetivo centrado en las infancias, que lo llevaron a comprar terrenos para construir la escuela “Pedro de Mendoza” que fue inaugurada en 1936, institución que atesora 16 de sus murales, a partir de la donación del terreno para su construcción en 1933, así como un lactario y un jardín de infantes entre 1946 y 1948.
La actual Escuela Primaria Común Nro 9 comparte con el Teatro de La Ribera -otra de las donaciones pensada por el artista para los actos escolares- y el Museo de Bellas Artes de La Boca inaugurado en 1938, la estructura arquitectónica y colorido sobre la Avenida Pedro de Mendoza.