Nuevos modos, más duro con los piquetes
En el marco de la búsqueda de un tono propio, Jorge Macri, tal como hizo en campaña, dejó claro que su administración no será permisiva con los piquetes ni los bloqueos de calles, una constante de los últimos años, en particular en la zona del centro porteño.
Mientras el Polo Obrero anunciaba una movilización para el 20 de diciembre, la primera en la presidencia de Javier Milei y la gestión del mandatario capitalino, en el Poder Ejecutivo adelantan mayor severidad.
“La gente espera de nosotros poder ejercer todas sus libertades. La libertad de manifestar, sin duda, pero también la libertad de circular, estudiar, trabajar o simplemente pasear por esta Ciudad de Buenos Aires”, expresó el flamante jefe de Gobierno y agregó: “De estas garantías he estado hablando con el presidente electo Javier Milei y con Patricia Bullrich, la ministra de seguridad del Gobierno Nacional. Vamos a trabajar en equipo para garantizar esas libertades”, afirmó Jorge Macri en un claro guiño al presidente libertario.
Tanto Macri como Milei dijeron varias veces en forma pública que mantienen un diálogo fluido basado en la prevención de los piquetes y manifestaciones en el espacio público.
De hecho, previo a la jura el futuro ministro de Seguridad porteño Waldo Wollf pidió “la Ley de reiterancia para que aquellos que infringen la ley reiteradamente puedan ser sancionados”: “Con el Ministerio Público Fiscal se le labra una infracción al que corta la calle la primera vez, luego una segunda vez, y a la tercera tiene que esperar el debido proceso preso”.
Wolff se lleva bien con Patricia Bullrich, futura ministra de Seguridad de la Nación. De hecho, unos días antes de la jura ambos se reunieron. “La Argentina que viene necesita orden, reglas claras y trabajo en equipo. La jerarquía y el aporte de la experiencia de Patricia Bullrich son sumamente valiosas para esta etapa que viene”, había dicho Wolff el 27 de noviembre.
Juan Castro