El arbitro que se quiso ir del Palacio Ducó
Se trata de la historia de Andrés Merlos árbitro de la primera división del futbol argentino quien suspendió temporariamente el apartido y amenazó con retirarse definitivamente del estadio Parque Patricios si no cesaban los canticos en su contra por parte del publico presente. Entre tantos partidos y el fin de semana largo paso rápido, pero no fue un hecho más, fue un verdadero papelón.
Iban 35 minutos de un partido intenso, poco más de seis minutos después del primer gol de Globo en su partido por la cuarta fecha contra Barracas Central cuando el publico estalló de furia y comenzó a insultar al árbitro por sus fallos erróneos, todos claramente en contra del equipo local. allí fue cuando se escuchó al clásico “Tomala vos, dámela a mi, vamos a matar a un referee”. El árbitro principal hizo gestos de lo que se estaba escuchando y amagó con dar por terminado el partido y abandonar el campo de juego, luego de dialogar con el DT local y un representante de la Liga Profesional de Futbol decidió continuar.
El incidente tiene lugar por una grosera falta en mitad de cancha contra el jugador Matías Cóccaro que el árbitro no cobra, allí comienzan as protestas y llueven los insultos desde las tribunas, hacia escasos minutos que el equipo local se había puesto en ventaja, gracias al gol de Gabriel Gudiño pero la parcialidad en los falso del árbitro convirtió la alegría en indignación.
Merlos se señaló la oreja y decidió parar el partido. Una y otra vez el arbitro con gestos muy ampulosos amagó con dar el pitazo final, suspender el encuentro y abandonar el campo de juego debido a los canticos que se podían escuchar en el estadio Ducó de Parque Patricios.
Huracán es un equipo que históricamente ha sido perjudicado por fallo arbitrales, que los llevo a perder campeonatos, descender de categorías y negarles ascensos. Este hecho de Merlos un pésimo árbitro, cuenta con un antecedente de su colega Héctor Paletta hoy relegado a tarea sen el VAR por sus malas actuaciones, cuando el sábado 29 de abril de 2017, en un partido entre Huracán y Newell´s al oír el mismo cántico detuvo momentáneamente el partido a los 33 minutos del primer tiempo.