Denuncian agravamiento de la pandemia de las drogas y las adicciones
Esta grave denuncia estuvo presentada en un documento denominado en el documento “Drogas y adicciones: un obstáculo para el desarrollo humano integral”, que fue elaborado por la Comisión Nacional de Pastoral de Adicciones y Drogadependencia, que coordina el padre José María Di Paola de extenso trabajo en el barrio de Barracas junto con Cáritas Argentina y la Familia Grande Hogar de Cristo.
Junto al popular cura “Padre Pepe”, en la presentación estuvieron presentes el padre Guillermo Torre, párroco de Cristo Obrero, del barrio Mugica; Beatriz Ballario, responsable del área de Abordaje Pastoral y Comunitario de las Adicciones de Cáritas; Romina Santomingo , acompañante del Hogar Madre de Lourdes, y María Elena Acosta, referente nacional de Hogares de Cristo.
La comisión que se ocupa de trabajar junto a los centros barriales que buscan dar respuestas a situaciones extremas de vulnerabilidad, realizó este trabajo presentado por el padre Pepe entre otros religiosos, arroja una pregunta como disparador del documento ¿Qué silencios cómplices contribuyeron a que las drogas y las adicciones sean hoy la otra pandemia silenciada?
El escrito reclama por un abordaje integral del problema, el padre Pepe advirtió que “hay una necesidad de que toda la política en la Argentina y en América Latina miren este tema”.
En la presentación vía zoom se realizaron fuertes críticas, a las medidas tomadas para enfrentar la pandemia. “Con las restricciones de todo orden generadas por la pandemia de Covid-19 y las medidas políticas que se implementaron para abordarla, quedaron huérfanos nuestros barrios”, advirtieron las voces de la Iglesia en la declaración
La presentación se basa en un trabajo de análisis más cualitativo que cuantitativo, que se suma al reciente informe presentado por el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA), que evaluó el impacto de la pandemia y concluyó que solo el 29,8% de los chicos tuvo acceso el año pasado a clases remotas por plataformas virtuales. En el sector bajo marginal, esa proporción fue apenas del 11,3%.