10 años de la Plaza Boedo, lograda con lucha vecinal
Este martes 8 de junio se cumplió el décimo aniversario de la inauguración de la Plaza Mariano Boedo, el principal espacio verde de uno de los barrios más cementados de la Ciudad de Buenos Aires. La obra se realizó gracias a la lucha de los vecinos.
En recuerdo de este hito, la Comuna 5 de Buenos Aires (Almagro y Boedo) hizo una reunión virtual con integrantes de la Junta de Estudios Históricos de Boedo y la Red Cultura Boedo.
Esta plaza es “la concreción de un sueño de los vecinos y vecinas de Boedo y de toda nuestra Comuna 5”, decían fuentes comunales.
El espacio verde tiene 10.500 metros cuadrados entre Estados Unidos, Loria y Carlos Calvo. Además, a metros de la esquina de Loria y Carlos Calvo funciona la Sede Comunal 5, montada en un antiguo edificio de valor patrimonial que fue restaurado. Cuenta con una dependencia del Registro Civil, por lo cual se celebran bodas.
En el pasado, tras la lucha de la asociación civil y ambiental Todos por la Plaza de Boedo, el 16 de abril de 2009 se aprobó la Ley porteña N° 3.033.
Su artículo primero establece: “Denomínase ¨Mariano Boedo¨ al predio ubicado entre las calles Carlos Calvo, Sánchez de Loria, Estados Unidos y Virrey Liniers, -denominación catastral Circ. 8, Secc. 30, Manz. 28, Parc. 1-, que fuera declarado de utilidad pública y sujeto a expropiación mediante la Ley 2266, BO N° 2623, sancionada el 21 de diciembre de 2006, afectado a Distrito de Zonificación UP (Urbanización Parque), a fin de ser destinado a espacio verde de uso público”.
Luego de las obras, el entonces Ministerio de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires inauguró la plaza el 8 de junio de 2011.
Este espacio verde cuenta con un anfiteatro, un área para eventos y exposiciones, zonas de juegos para niños, calesita, canil, postas aeróbicas, una cancha de básquet, áreas con mesas y pérgolas de sombra cubiertas de enredaderas.
Los vecinos hicieron propio este lugar y añadieron sitios destacados. A metros de la Sede Comunal 5 crearon un Espacio de Memoria, donde hay placas que recuerdan a ciudadanos detenidos desaparecidos. En la medianera que limita con las casas se colocaron chapones intervenidos con obras de arte y un gran mural que evoca a la antigua estación de tranvías que funcionaba en el predio.
Asimismo, desde el inicio rechazaron la instalación de la Sede Comunal 5 en la plaza, pedían que el edificio de valor patrimonial sea utilizado para fines sociales y culturales. Pese a un litigio judicial, se instalaron las oficinas. La planta baja cuenta con espacio para exposiciones de arte, ahora suspendidas por la pandemia.
En 2011, fuentes del Gobierno porteño rememoraban: “La plaza comprende los 10.500 m2 de un terreno que estaba en desuso desde hacía décadas. En el terreno que hoy luce remodelado y que hasta hace un tiempo era un baldío, funcionó una estación de tranvías hasta 1963. Unos 19 años más tarde, el predio fue adquirido por la empresa de transportes ¨El Tata¨, que finalmente terminó quebrando. A esa altura, los vecinos ya reclamaban un espacio verde, por lo que en 2006 la Legislatura ordenó su expropiación y la construcción de un parque”.
J.M.C.