La Legislatura dio el primer paso para modificar el Código Urbanístico
Se votaron cambios en la normativa que regula las edificaciones y que ahora deberá tratarse en Audiencia Pública antes de su sanción como ley
El Código Urbanístico, que es la normativa que regula el uso y la edificación en los espacios públicos y privados de la Ciudad de Buenos Aires, fue sometido a importantes modificaciones en su articulado, por iniciativa de la Jefatura de Gobierno luego reconsiderada por los legisladores y votada en primera instancia este jueves en la Legislatura porteña.
La adecuación de dicho código obtuvo aprobación en “primera lectura” por 32 votos a favor.
Ahora deberá discutirse el proyecto en Audiencia Pública la cual debe publicarse en todos los medios de la Ciudad de Buenos Aires, antes de una “segunda lectura” para su sanción como ley. La diputada Paola Vanesa Michielotto, miembro informante de la comisión legislativa de Planeamiento Urbano, hizo hincapié en asegurar que antes del segundo debate serán consultadas las entidades barriales y las juntas comunales y se recibirán con atención todos los planteos y propuestas de los vecinos de la Ciudad. Esta postura fue ratificada, al final del debate, por el jefe del bloque oficialista, Dario Nieto, quien aseveró que se tomarán en cuenta todas las observaciones que planteen vecinos, organizaciones y bancadas políticas.
Antes del debate en el recinto, la comisión de Planeamiento Urbano hizo 6 reuniones de diputados y 5 de asesores, en la cuales se recibieron observaciones. Participaron funcionarios del Poder Ejecutivo, vecinos, organizaciones profesionales y se hicieron ajustes al proyecto original en base a demandas de los ciudadanos y propuestas de los bloques. En el debate de hoy, todos los bloques hicieron sus0 ponencias, aportes y críticas.
Se explicó desde el oficialismo que los cambios buscan “generar equilibrio urbano en tres escalas: “A nivel ciudad, impulsando el desarrollo del sur y consolidando la zona norte; a nivel barrial, con el ajuste de alturas priorizando las escalas barriales y resguardando el patrimonio; a nivel manzana, ajustando pisadas y alturas, principalmente ampliando el Centro Libre de Manzana en las Unidades de Edificabilidad de Altura Baja, respondiendo a las demandas vecinales”.
“La Ciudad necesita una densidad mejor distribuida y un desarrollo urbano más equilibrado, que preserve la identidad barrial y se contemple el entorno, el proyecto propicia la modificación de las unidades de sustentabilidad de baja densidad, la modificación de las planchetas de edificabilidad y usos, la sustitución del instrumento de desarrollo territorial, modificaciones de texto, gráficos y distintos niveles de protección patrimonial de inmuebles”, abundan los fundamentos.