El secundario nocturno de Liniers pasará a llamarse “Caídos de Malvinas”
Se trata de la Escuela de Reingreso que funciona a contraturno en la sede de Gallardo 149, a la que asisten cerca de 160 alumnos de entre 16 y 18 años que perdieron su regularidad escolar y hoy se aprestan a completar el secundario.
En diciembre pasado se aprobó en primera lectura el proyecto de ley (Expte. 1006-P-23) por el que se impone el nombre de “Caídos de Malvinas” a la Escuela de Educación Media N° 1 D.E. 18, que funciona en la sede de Gallardo 149, a metros de la Estación Liniers.
Se trata de un establecimiento educativo que se ofrece en el turno vespertino y forma parte de las denominadas “Escuelas de reingreso”, que fueron creadas en 2004, en el marco del programa Deserción Cero, con el fin de garantizar la obligatoriedad del nivel medio. Estas escuelas están destinadas a jóvenes desde los 16 años que no estén escolarizados, para que puedan volver a la escuela a completar sus estudios secundarios.
La iniciativa, impulsada por el legislador Emmanuel Ferrario (Vamos por más) surgió a partir de un taller desarrollado en el establecimiento para el que se convocó a estudiantes de todos los cursos y niveles, desde 1° a 4° año. Allí se conversó sobre cómo habían llegado a la escuela, las oportunidades que se les habían ofrecido y las características que hacían que pudieran volver a formar parte de un espacio educativo. Durante la conversación apareció la postergada necesidad de que la escuela tuviera un nombre.
Se decidió entonces que cada curso, junto a su tutor/a, eligiera un nombre posible. Una vez surgida la terna definitiva, el grupo comenzó a realizar videos para que cada nombre pudiera ser presentado a la totalidad de la escuela y se eligiera el definitivo. Paralelamente, se realizaron las urnas y las boletas para utilizar el día de la votación.
“Con el propósito de consolidar vínculos, fortalecer el sentido de pertenencia y favorecer el reconocimiento mutuo, se ha considerado la necesidad de otorgar a la escuela un nombre propio, que permita identificarla, diferenciarla y reflejar sus rasgos más íntimos y distintivos. Por esta razón, la elección del nombre fue Caídos de Malvinas, que representa un homenaje a aquellos que dieron su vida en defensa de nuestra patria, se recuerda su sacrificio y se honra su memoria de una forma que trasciende el tiempo”, expresa el proyecto legislativo, en sus fundamentos.
Y más adelante, explica “por otra parte, esta elección representa una oportunidad para difundir la historia y las consecuencias de la guerra, y para reflexionar sobre los valores que queremos promover como sociedad. No sólo rinde homenaje a nuestros héroes, sino que también nos permite seguir construyendo una cultura de memoria y solidaridad, fomentando valores como la lealtad, el compromiso y la defensa de la soberanía. Es menester seguir abonando una educación basada en valores cívicos, fomentando la construcción de una sociedad más justa, más libre y unida”.
La confirmación del nombre de la escuela se concretará tras la realización de la audiencia pública que tendrá lugar el próximo lunes 3 de junio a las 16, en la sede de la Legislatura porteña (Perú 160). Una vez finalizada, el proyecto de ley será aprobado en segunda lectura.
Una puerta permanentemente abierta a la educación
La Escuela de Reingreso de Liniers es uno de los ocho establecimientos de esta modalidad que funcionan en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires. Los otros se ubican en los barrios de Barracas, Parque Patricios, Villa Soldati, Villa Lugano, Belgrano, Balvanera y Almagro.
En todos los casos, la cursada se realiza en turno vespertino con una duración de cuatro años, y se reconocen las materias aprobadas previamente en otros establecimientos. La escuela de Liniers cuenta además con sala de “primera infancia”, para aquellos alumnos que deban concurrir a cursar con sus hijos. Actualmente tiene una matrícula de casi ciento sesenta estudiantes, distribuidos en ocho cursos de primero a cuarto año.
Entre su población se encuentran jóvenes de entre 16 y 18 años que dejaron de estar escolarizados, ya sea porque no aprobaron el año o porque quedaron libres. En su mayoría, los estudiantes provienen de Villa Lugano, Mataderos, Ciudad Oculta y Piedrabuena, también hay algunos de Ciudadela y del complejo habitacional conocido como Fuerte Apache. La jornada escolar se extiende por seis horas, con un recreo de quince minutos en el que se sirve comida.
La modalidad de Reingreso surgió a partir de la necesidad de contener a los jóvenes que eran expulsados del sistema de educación formal debido al fracaso escolar. Esta institución pública y laica, dependiente del Ministerio de Educación porteño, cuenta con un régimen de aprobación por materias que permite ir acreditando asignaturas anuales y cuatrimestrales. Durante el trayecto, se cursan asignaturas relacionadas con las Ciencias Sociales y Jurídicas, Ciencias Exactas, y Tecnología de la Comunicación y la Información.