La Boca Resiste y Propone “Memoria sí”
Este año, en el marco de la Semana de la Memoria y bajo la consigna Memoria Sí, decidimos hacer eje en nuestro querido vecino y benefactor, Don Benito Quinquela Martin, que no es una postal, que no es un producto del mercado, ni un conjunto de beneficios para desarrolladores inmobiliarios, así se expresa la organización social La Boca Resiste y Propone
Memoria es también recordar su historia, que es la de un niño al que su madre biológica por circunstancias que desconocemos, dejó en la casa de niños espositos con medio pañuelo bordado, quizás con la esperanza de que algún día volvieran a encontrarse. Hoy no lo sabemos, pero lo que sí podemos decir, es que a los 6 años fue adoptado por Manuel, un inmigrante italiano y Justina una entrerriana. Dueños de una carbonería a pocos metros Benito llegó a un barrio que lo adoptó junto con sus padres y al que él devolvió con creces lo que, para muchos de nosotros es su mejor y más grande obra: Caminito, un lactario, un hospital odontológico infantil (el primero y único de la ciudad), un museo, un teatro, un jardín de infantes, una escuela primaria, una escuela técnica de artes gráficas y el curso de fotografía que desde hace más de 60 años funciona allí con 200 inscriptos.
Es decir Quinquela con la suya y en articulación con el estado, devolvió al barrio un conjunto de posibilidades para la concreción de los derechos de sus vecinos y vecinas, cooperando de esta manera para que las familias puedan alimentar el cuerpo, la mente, el ánimo y el espíritu.
Hoy esta obra de Quinquela, estas posibilidades, este derecho adquirido está en riesgo, el día 5 de marzo el gobierno de la ciudad informó que el curso de fotografía no iba a continuar, interrumpiendo incluso la finalización de cursada a aquellos alumnos que están atravesando la mitad del proceso, amenazando a los docentes con sanciones por hacer su trabajo.
Y acá, como diría Quinquela, queremos poner un poco de coherencia a la locura, no existe motivo posible por el que el ministerio de educación decida cerrar este curso, no existe posibilidad que aceptemos mansamente esta arbitraria y absurda decisión, no estamos dispuestos al autoritarismo que nos proponen, si no vienen al barrio a resolver este asunto vamos a ir al ministerio hasta que nos atiendan, este no es un problema de alumnos y docentes porque el cierre de este curso constituiria un atropello al patrimonio material, cultural, pedagógico y simbólico de nuestro barrio, el individualismo acá no tiene cabida porque somos una comunidad, acá no manda el dios mercado.
Estos pañuelos hoy aquí representan, ¡¡¡la amorosa búsqueda, la solidaridad, la cooperación, la justicia social, las posibilidades y el derecho humano a una democracia plena que nos permite decirles que vamos a luchar como una madre, que vamos a luchar como una abuela, que la boca tiene dientes para defender con orgullo la obra de Quinquela y que EL CURSO DE FOTOGRAFÍA NO SE CIERRA!!!