Puede llegar la linea D de subte hasta Puente Saavedra?
Poco más de 2 km separan a la estación Congreso de Tucumán en nuestra Comuna 13 de Puente Saavedra
La posibilidad de que el Subte llegue hasta Puente Saavedra es, junto con la extensión de líneas de Subte o tren a los aeropuertos y a Puerto Madero una de las posibilidades más recurrentemente discutidas entre los planificadores urbanos e interesados en cuestiones de transporte.
La línea D del Subte que recorre toda la Comuna 13, termina a poco más de 2 km de ese punto, un importante centro de trasbordo por el que pasan numerosas líneas de colectivos y donde se encuentra la estación Aristóbulo del Valle de la línea Belgrano Norte. Pese a esto, una eventual extensión de la línea hasta Puente Saavedra no forma parte de los planes oficiales en la actualidad.
A lo largo de la historia, han sido numerosos los proyectos que plantearon la necesidad de que el Subte alcanzara Puente Saavedra. El primer proyecto fue el Plan Cóndor de 1957, cuya premisa básica era la extensión de las líneas radiales hasta los límites de la Capital. Posteriores versiones del mismo plan en la década del 60 e incluso el plan del Estudio Preliminar del Transporte de la Región Metropolitana (EPTRM) mantuvieron ese objetivo como proyecto.
No obstante, nunca llegaron a licitarse obras en ese sentido: al lanzarse en 1968 la extensión de la linea D, sólo se contempló el tramo desde Palermo hasta Cabildo y Monroe. De todas maneras, de este proyecto sólo se concretaría una pequeña parte, ya que las obras quedaron suspendidas a la altura de la calle Carranza. La iniciativa fue retomada casi 20 años después, cuando en 1987 se inauguró -en forma provisoria- la estación Ministro Carranza y se anuncio la extensión de la linea D hasta Cabildo y Monroe, cabecera luego reubicada en la Av. Congreso por razones técnicas.
En la segunda mitad de los años 90, la extensión de la línea D a Belgrano avanzó significativamente: luego de que en 1993 se inaugurara la estación Ministro Carranza definitiva, en un lapso de menos de tres años -entre mayo de 1997 y abril de 2000-, se inaugurarían las estaciones Olleros, José Hernández, Juramento y Congreso de Tucumán.
A fines de los 90, la concesionaria Metrovías había encargado un estudio de factibilidad para extender la línea D hasta Puente Saavedra con dos estaciones: Crisólogo Larralde y General Paz. Esta propuesta incluía la construcción de una cochera bajo la Av. San Isidro Labrador, donde se disponía del espacio suficiente para este tipo de instalaciones: se trataba de una posibilidad que también había sido contemplada por Subterráneos de Buenos Aires (SBASE).
El proyecto se derrumbó cuando el aluvión de usuarios que trajo Congreso de Tucumán, que superó todo lo previsto. Y si bien “las nuevas estaciones absorbían el nuevo volumen de pasajeros, esto no era así con las viejas estaciones [del tramo Catedral – Palermo]”, que había sido concebido para un tráfico mucho menor. Sumar más estaciones hubiera implicado incorporar nuevos pasajeros (de Núñez, Saavedra y de la zona norte que desembocaran en Puente Saavedra) que la línea, por las propias limitaciones de la infraestructura del tramo más antiguo, era incapaz de absorber.
Por último, el golpe final fue la crisis del 2001 y la salida de la convertibilidad. El deterioro de las variables económicas llevó a priorizar otras obras de Subte de previsible mayor impacto como las obras de extensión de la línea B -que llegaría a Los Incas en 2003-, y la construcción del tramo inicial de la linea H, la primera nueva desde 1944, y posteriormente la extensión de la línea A.