Mataderos: la Ciudad repavimentó Larrazabal con neumáticos recuperados
El Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana de la Ciudad de Buenos Aires, a través del Ente de Mantenimiento Urbano Integral (EMUI), renovó 4.000 metros cuadrados de la avenida Larrazábal del 0 al 1300, en Mataderos (Comuna 9), y por primera vez se utilizó asfalto sustentable, una mezcla de pavimento tradicional y polvo de caucho proveniente de neumáticos en desuso. Se está evaluando implementar el modelo en el resto de CABA.
La ventaja es que este asfalto tiene una mayor durabilidad, ya que es un 50% más resistente. Además, reduce el ruido de los vehículos, porque la goma crea una superficie más porosa y flexible en las calles. Otro aspecto positivo es que requiere menor mantenimiento, porque es más resistente.
“Gracias a esta intervención, le dimos una nueva vida a casi 2 mil kilos de neumáticos en desuso. Para eso, se utilizó un porcentaje de polvo de caucho (proveniente de los neumáticos) y asfalto tradicional modificado (compuesto por látex, plásticos u otros similares que se agregan al asfalto tradicional). La incorporación de caucho brinda el doble de resistencia que el asfalto tradicional y reduce el ruido de los vehículos, lo que nos permite construir calles más seguras, transitables y sustentables”, explican fuentes oficiales.
“Estamos mejorando la seguridad vial en la Ciudad gracias a las obras de repavimentación realizadas con neumáticos recuperados un residuo que transformamos en un nuevo recurso. Un espacio público y de calidad es posible”, expresó la Ministra de Espacio Público e Higiene Urbana Clara Muzzio.
Los neumáticos se procesan en trozos más pequeños mediante una trituradora y se mezcla con el asfalto tradicional. La empresa ConcretNor (empresa del GCBA que se encarga de la obra) la une con arena, piedras y sacarosa, generando un material homogéneo. Por último, esa mezcla de caucho y asfalto es incorporada a las calles con la ayuda de un camión, de igual forma que el asfalto tradicional.