Flores para Martina: un mural en Villa Crespo rinde homenaje a una joven que falleció tras ser atropellada
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires declaró de “interés cultural” al mural denominado “Flores para Martina”. El mismo está en Villa Crespo y homenajea a una adolescente que fue víctima de un siniestro vial en 2016. Además de recordar la figura de Martina Miranda, la obra busca concientizar acerca de la importancia de la seguridad vial, que genera decenas de muertes por año en el distrito porteño.
La distinción se hizo efectiva en una ceremonia en la que fue colocada una placa en recuerdo de Martina, al lado del mural, localizado en el Patio Gurruchaga del barrio porteño de Villa Crespo (Comuna 15). A dicho evento asistieron Oscar y Silvia, padres de joven; Victoria Ferreyra, autora de la obra, y representantes de Madres del Dolor, organismo que lucha por prevenir, entre otras cosas, los accidentes viales.
“Flores para Martina” fue inaugurado a comienzos de 2021, en el espacio situado en Gurruchaga entre Cabera y Gorriti. Ferreyra hizo el mural con la colaboración de Mayk Cassais, y lo donó a la familia de la adolescente fallecida. El mismo lleva el lema “Trascender es seguir viviendo”.
Al momento de confeccionarlo, la artista destacó la intención de recordar a Martina “viva”, por lo que la muestra sonriente, con los ojos abiertos y tomándose la pera, en un gesto expresivo de felicidad. A lo largo de los 1600 metros que tiene de extensión, también se dejan ver la Madre Teresa de Calcuta y Frida Kahlo, acompañadas de flores y elefantes.
La iniciativa de homenajear al mural surgió del legislador Ariel Álvarez Palma (del bloque UCR-Evolución). “Cuando me contaron acerca de lo que le había pasado a Martina y cómo sus padres decidieron recordarla a través de este elocuente mural en el que se la recuerda a Martina viva, decidí que debía ser destacado de alguna manera”, afirmó. A su vez, el diputado porteño destacó que “el mural transmite un mensaje lleno de vida, alegría y desde este lugar se busca generar conciencia vial”.
La adolescente tenía 16 años al momento de ser atropellada. El hecho ocurrió el 14 de febrero de 2016, momento en que Martina regresaba de ver a su novio Franco. En la esquina de Vera y Scalabrini Ortíz, Damián Villanueva la arrolló en su vehículo a pesar de que el semáforo estaba en rojo, y huyó. Se suicidó dos días después del hecho.