Tensión en el Barrio 31: más de 100 familias resisten el desalojo ante la presencia de policías y topadoras
En el marco de una orden de desalojo vigente, decenas de efectivos policiales y varias topadoras se hicieron presentes en las inmediaciones de un terreno baldío usado como basural dentro del Barrio 31 de Retiro (Comuna 1) que ha sido tomado por más de 100 familias sin techo.
Hay una orden de desalojo dispuesta por la Fiscalía en lo Penal y Contravencional Nº 11 del Ministerio Público Fiscal la Ciudad de Buenos Aires, a cargo de la fiscal Valeria Massaglia.
Ante esta decisión judicial, el Gobierno porteño, a través de un comunicado de prensa, respaldó el proceso para que “se ejecute el desalojo” del campamento familiar. Por eso reforzó la presencial policial.
La semana pasada, las familias que participan de esta toma llamada “De la Conteinera” enviaron una nota a distintos organismos estatales, como el Ministerio de Mujeres de la Nación y el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat porteño.
Allí manifestaron: “Somos más de 100 (cien) familias, con niños y niñas que nos encontramos acampando en un terreno baldío usado como basural desde hace más de 6 años, ubicado en el barrio Padre Carlos Mugica. Muchas de nosotras somos mujeres que venimos atravesando situaciones de violencia de género lo que nos llevó a tomar estas tierras para tener un lugar donde vivir”.
“Desde que estamos asentadas sufrimos el hostigamiento y presión de la fuerza policial y el Viernes 16 recibimos una orden de desalojo del predio en 72hs hábiles. Queremos que se cumpla nuestro derecho a una vivienda digna como está expresado en la Constitución Nacional. Todas nosotras vivimos y nos mantenemos con trabajos precarios, independientes o por hora, incluso muchas de nosotras estamos desempleadas”, sumaron.
“Nuestros escasos ingresos no cubren nuestras necesidades básicas, cuando no nos alcanza para cubrir una canasta básica alimentaria que hoy en día está en $68.000.Sumado a que a muchas de nosotras el comedor de la secretaría de integración urbana nos recortó la comida diaria a más de 16mujeres y la de sus hijos. La no disponibilidad de alquileres, incluso informales dentro del barrio, para mujeres con niños y los elevados costos nos dejan en una situación de abandono por parte del Estado y de todos los organismos a quienes les corresponde subsanar nuestras necesidades”.
“Desde el primer día que estamos, el 30 de Junio, soportamos lluvias, viento y bajísimas temperatura, estando a la intemperie. Muchos de los niños se encuentran enfermos a causa del clima, ya que los primeros días la policía nonos dejaba ingresar elementos para resguardarnos del frío, (como colchones, frazadas, abrigos y leña, ni comida).Soportamos todas estas adversidades luchando por la única solución definitiva: una vivienda digna para nuestros hijos e hijas. Por una vida sin violencia y trabajo con derechos para todos y todas, Salud y Educación”, concluyeron.