Caballito: proponen entregar por 20 años el predio del Gran Paseo de Compras a una fundación de comerciantes
El integrante de la Junta Comunal 6 Osvaldo Balossi presentó un proyecto de ley para otorgar a la Fundación Ganímedes, integrada por 30 familias de vendedores, el permiso de uso por 20 años del predio ubicado en avenida Rivadavia 5377, en Caballito.
Esta propuesta plantea que el inmueble “deberá ser destinado por la entidad beneficiaria a la práctica de actividades comerciales, de difusión y emprendimientos productivos”.
El comunero Balossi señala que desde 2011 la Fundación Ganímedes realiza actividades comerciales en lo que se denomina Gran Paseo de Compras Caballito. Actualmente componen dicha Fundación 30 familias. Todas ellas trabajan en el Paseo mencionado, junto a más de 200 personas. Familias que hasta hace no muchos años trabajaban como vendedores ambulantes sobre la Avenida Rivadavia.
Previo a la existencia formal del Paseo y producto de una decisión del Gobierno de la Ciudad, esas vendedoras y vendedores fueron relocalizados en terrenos que por entonces se encontraban abandonados, precisamente donde hoy funciona el Paseo de Compras. Esos terrenos fueron puestos en valor por el trabajo de estas familias.
En 2008, estas familias constituyeron la Cooperativa de Trabajo El Glaciar. Por solicitud del GCBA decidieron constituir la Fundación Ganímedes, para poder así tener la opción de compra del inmueble.
La fundación firmó un contrato con el Gobierno de la Ciudad para hacer uso del inmueble por el que abonaban una suma mensual estipulada previamente. “Este contrato no tenía plazo de vigencia, ni vencimiento, pero dejaba abierta la opción de compra a la Fundación en cuestión. Sin embargo, de manera unilateral e inconsulta el Gobierno decide dar por finalizado el contrato e intimar el desalojo, lo que conlleva a que desde el año 2018 el GCBA no ha recibido el pago en concepto de alquiler por parte de la Fundación. Generando una situación de mucha angustia para todas las familias que ven en peligro su fuente de trabajo y, por lo tanto, de ingresos”, explica el comunero.
Desde entonces, “ya han sido varias las oportunidades en las que el Gobierno de la Ciudad ha intentado desalojar a las personas que hasta el día de hoy, inclusive, desarrollan su actividad comercial allí, y por la cual se generan numerosos puestos de trabajo, garantizando un ingreso monetario a decenas de familias”.
En el año 2019 el GCBA quiso avanzar con el desalojo, pero la fundación interpuso un recurso de amparo a la vez que pudo recibir el aval de más de mil vecinos y vecinas que han adherido a su permanencia a través de una juntada de firmas espontanea en defensa del espacio ya constituido.