Camino al tercer censo de gente en situación de calle
Organizaciones de la sociedad civil especializadas en temáticas referidas a la población en situación de calle informaron que harán el tercer Censo Popular de Gente en Situación de Calle. En mayo el Gobierno porteño hizo un estudio propio y concluyó que cerca de 1.000 personas duermen a la intemperie y otras 1.500 se alojan en paradores. Para los referentes de estas entidades, las autoridades hicieron un “subregistro” que no refleja la realidad.
De hecho, el primer censo popular se hizo en 2017 y concluyó que había 4.394 personas viviendo en las calles porteñas o en paradores. De esa cifra, 269 adultos y 33 niños vivían en Balvanera y 135 adultos y 3 niños en San Cristóbal. El segundo se realizó en 2019 y contó a 7.251 individuos en situación de calle. Ninguno de los dos fue refrendado por Ciudad, por diferencias metodológicas.
Ahora, en la víspera del lanzamiento del Operativo Frío 2021, el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat divulgó los datos preliminares, inferiores a estudios de años atrás. A finales de junio la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad iba a publicar el informe detallado, con la situación barrio por barrio.
En la madrugada del miércoles 12 de mayo más de 300 voluntarios del GCBA recorrieron toda la ciudad para hacer el censo. Tuvo apoyo de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF), Universidad de Luján y Universidad Católica Argentina (UCA).
Las mismas entidades que ahora harán el tercer censo popular, en diciembre de 2020 habían firmado un acuerdo para constituir una mesa de trabajo con el Gobierno porteño. Luego se apartaron, al considerar que la voluntad de las autoridades era hacer un “registro a la baja”.
Es por esto que mediante un comunicado conjunto se manifestaron Proyecto 7, Centro de Estudios Legales y Sociales, Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia, MTE, Nuestra América, Aires: “Dada la decisión del Gobierno de la Ciudad de llevar adelante un nuevo relevamiento de personas en situación de calle que subregistra población y, teniendo en cuenta que además incumplió los compromisos firmados el año pasado, las organizaciones abajo firmantes comunicamos la decisión de realizar un nuevo censo popular, para poder tener información fehaciente respecto a cuánta gente se encuentra viviendo en esta situación”.
“Apenas las condiciones sanitarias lo permitan, las organizaciones que trabajamos la temática estaremos desarrollando el nuevo censo con la misma metodología empleada durante los censos 2017 y 2019. Esto implica su realización mediante un barrido territorial exhaustivo realizado a pie por quienes recorren los barrios cotidianamente, durante varios días y no solo de noche. Esto es fundamental para poder entrevistar y tener información específica sobre la situación en que se encuentran y, sobre esta base, diseñar políticas públicas que permitan mejorar las condiciones de quienes no tienen un lugar donde vivir. En el relevamiento del año 2019, también muchas mujeres -incluso embarazadas- mencionaron problemas de violencia por lo cual tuvieron que abandonar su vivienda, visibilizando la ausencia de políticas específicas para esta población”, sumaron.
“Los resultados del censo popular de 2019 demuestran que el principal motivo por el cual la gente terminó en situación de calle fue la pérdida de empleo, que las dejó sin ingresos para poder pagar el alquiler. Esta situación se agravó durante la pandemia. Según un relevamiento que realizaron el CELS y el IDAES en 2020, el 60% de los hogares inquilinos de la Ciudad tenía deudas de alquiler. A pesar de esta situación crítica, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no implementó ninguna política para contener a quienes podían quedarse sin su vivienda durante la pandemia. Tampoco puso en marcha políticas para garantizar que se cumpla el decreto 320 del gobierno nacional que, entre otras medidas, suspendió los desalojos. Por eso, vamos hacia el Tercer Censo Popular de Personas en Situación de Calle. La calle no es un lugar para vivir y mucho menos, para morir”, concluyeron.
No obstante, desde el Gobierno porteño defienden el censo de 2021. En el Ministerio de Hábitat y Desarrollo Humano manifiestan: “El objetivo de este trabajo que debe realizarse anualmente es identificar concretamente cuántas personas se encuentran viviendo en calle y en los 32 Centros de Inclusión Social con los que cuenta la Ciudad de Buenos Aires, muchos de ellos gestionados por organizaciones de la sociedad civil. En 2020, el relevamiento no se realizó por las condiciones sanitarias, el ASPO y la incertidumbre provocada por la pandemia del Covid-19”.
“El operativo contó con 74 móviles y más de 300 personas. Cada móvil incluía un operador del programa Buenos Aires Presente (BAP) y un profesional de la Dirección de Estadísticas y Censos. Fueron auditados por representantes de la Asesoría Tutelar, orientada a niños, niñas y adolescentes. Adicionalmente, cada recorrido fue monitoreado a través de una aplicación que conecta el móvil con la sede del BAP para asegurar el barrido total de la Ciudad. Los 74 móviles que rastrillaron la Ciudad por completo utilizaron dos planillas con objetivos diferentes. La primera sirve para realizar un conteo observacional y registrar la cantidad de personas en situación de calle según los rasgos sociodemográficos percibidos por el registrador (principalmente sexo y rango de edad). La segunda, se trata de una encuesta no probabilística que se aplica a todos aquellos que quieran y se encuentran en condiciones de responder”, añadieron.
Además, sobre el Operativo Frío 2021 fuentes oficiales indican: “Se realiza a través del programa Buenos Aires Presente (BAP), donde los equipos móviles especializados recorren la ciudad para realizar el abordaje de las personas en situación de calle para invitarlos a ir a los Centros de Inclusión Social del ministerio e intentar que ninguna persona duerma en la calle. El abordaje de este operativo es realizado por más de 570 trabajadores del BAP y los centros”.
Agregan que el Gobierno porteño dispone actualmente de 32 centros de alojamiento permanentes, y 3 centros de emergencia abiertos desde el inicio de la pandemia (Parque Roca I, II, III), sumando un total de 2.492 plazas. Todos los dispositivos cuentan con servicio de ducha, elementos de aseo personal, 4 comidas, talleres para contención psicológica, así como también para la inserción social, laboral y oportunidades de revinculación familiar. Más de 570 trabajadores del BAP y los Centros de Inclusión, realizan el abordaje día a día.
J.M.C.
Imágenes:
Arriba ¨Sinécdoque¨ de Julio Colantoni (colaborador del libro La calle no es un lugar para vivir)
Luego de Minutouno
Abajo de Nueva-Ciudad