Ciudad hará un seguimiento a las personas que se vacunen con la Sputnik V
Este martes, mientras inicia en el país la campaña de vacunación contra el Covid-19, el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, pidió información técnica al Gobierno ruso sobre la Sputnik V y señaló que aquellas personas que se vacunen tendrán un seguimiento telefónico para ver cómo evolucionan.
“A todas las personas que se vacunen vamos a hacer llamados telefónicos con frecuencia, vamos a hacer alerta temprana de efectos secundarios producidos por la vacuna para brindar atención médica, vamos a hacer el reporte al sistema de fámarco-vigilancia nacional, y además vamos a coordinar y planear el turno de la segunda dosis, por eso es tan importante que todos los que se vacunen del sistema de salud dejen el número de celular que usan efectivamente”, dijo el funcionario durante una conferencia realizada en la Jefatura porteña de Parque Patricios (Comuna 4).
Desde este martes, el Gobierno porteño va a aplicar 23.100 dosis (de la partida nacional de 300.000) en 17 hospitales públicos y 20 centros privados.
Sobre el futuro de la campaña dijo: “Cada vez que tengamos un partida confirmada iremos indicando a qué personas alcanzan”. Señaló que se identificó a 1.100.000 personas por ser grupos de riesgo.“Este primer grupo lo integran los trabajadores de la salud, que serán vacunados en los mismos centros donde trabajan. Vamos a vacunar en 17 hospitales públicos de CABA y 20 centros privados o universidades o de la seguridad social. En estos centros también van a autovacunarse. Los que no trabajan en ninguno de ellos podrán pedir turno en estos 17 hospitales”.
El ministro porteño volvió a insistir en la necesidad de contar con datos técnicos sobre la Sputnik V: “Para poder validar datos y sobre todo para contestar algunas preguntas en detalle, como son por ejemplo las de los diferentes subgrupos de la sociedad y cómo se han comportado en términos de eficacia, necesitamos la apertura de los datos técnicos. Y esa apertura ocurre por varios mecanismos. El primero es una publicación científica, cuestión que el Instituto y el gobierno nacional han dicho que ocurrirá en los próximos días. Pero también podría ser que se presente la información ante alguna entidad regulatoria internacional, que hacen rápidamente públicos los informes”.
Agregó: “Nosotros necesitamos acceder en el corto plazo a la información técnica y al detalle para hacer una autoevaluación, no solamente los funcionarios y los técnicos, sino la sociedad toda, en este período hasta la próxima entrega. Y que cada uno pueda decidir en forma autónoma si nos damos la vacuna en base a datos y no en base a la confianza que uno pueda tener de diferentes instituciones y gobiernos”.