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Spinetta y su juventud en Saavedra: la anécdota en Estudiantes del Norte de cómo conoció a Los Beatles

Este martes 8 de febrero se cumple el décimo aniversario de la muerte de Luis Alberto Spinetta, uno de los pilares de la música nacional.

Asimismo, en la zona se lo recuerda como un vecino entrañable y una figura destacada de la vida cotidiana. Abundan las anécdotas en Villa Urquiza sobre su casa-estudio de la calle Iberá 5009, bautizado La Diosa Salvaje. También residió en Pedraza y Miller.

Dentro de la Comuna 12, Villa Urquiza no fue el único sitio frecuentado por el Flaco. Él mismo había contado que frecuentaba el barrio de Saavedra cuando visitaba a su abuela, Ana Catalina, quien vivía en Besares y Holmberg.

De hecho, durante una entrevista evocó que durante una fiesta en el Club Estudiantes del Norte (Balbín y Goyeneche) escuchó por primera vez a Los Beatles, un grupo que fue crucial en su formación musical.

“La primera vez que escuché a Los Beatles. Fue en un baile en Estudiantes Norte, pasaron Love me do y le pregunté al disc jockey qué era eso. “Me parece que se llaman Los Escarabajos”, me contestó. A partir de ese momento, cada vez que pasaban Los Beatles, me daba una especie de fiebre total. Ni te cuento cuando vi las primeras fotos en los diarios. Tuve un ataque de beatlemanía”, indicó Spinetta.

En la actualidad, a pocas cuadras del club de Saavedra se erige el paso bajo nivel que lleva su nombre, sobre la avenida Congreso. En la plaza seca del mismo hay una colección de murales e ilustraciones con la tapa de sus discos como solista y con “las bandas eternas”.

Asimismo, la figura de Spinetta reviste territorialidad por tantos otros motivos. Su familia vivía en Arribeños, entre Congreso y Quesada. Con pocas cuadras de distancia, residían los demás integrantes de Almendra, primera banda del Flaco y pionera del rock nacional. De hecho, por ser vecinos es que entraron en contacto y pudieron conformar este grupo.

También quedó grabado en el imaginario popular su cercanía al Bajo Belgrano, ya que fue el nombre del tercer álbum de estudio de la banda de rock Spinetta Jade (1983).