Continúan combatiendo el mercado ilegal de celulares robados
Desde la Policía de la Ciudad siguen allanando locales de venta de celulares en otra galería de Balvanera, ahora Rivadavia al 2600.
Según informan desde Policía de la Ciudad el procedimiento fue realizado por la División Sumarios y Brigadas de Prevención de la Comisaría Comunal 3 y la División Conductas Informáticas Ilícitas de la Policía de la Ciudad, junto a la Agencia Gubernamental de Control (AGC) y bajo la supervisión de la Dirección General de Coordinación del Ministerio de Justicia y Seguridad.
Intervinieron el Juzgado Criminal y Correccional Federal Número 4, a cargo del doctor Ariel Lijo y ante la Secretaría 8 del doctor Canero, y la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas 17, del doctor Walter López, Secretaría Única, que avalaron lo actuado y procedieron al secuestro de toda la mercadería ilegal, además del traslado de los detenidos.
Los agentes se dirigieron a una galería de la avenida Rivadavia al 2600 donde siete locales ofrecían teléfonos celulares y accesorios. Al realizar la inspección, se comprobó que comercializaban aparatos denunciados como robados al Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), por lo que se procedió a clausurar a seis de ellos. El séptimo se lo tapió por violar una clausura previa y detuvieron al encargado.
Se incautaron 230 celulares, 176 baterías, 7 tablets, 19 herramientas para la apertura de equipos y un mostrador.
Vale considerar que solamente por la zona del Balvanera ya vienen haciendo muchos operativos en diferentes galerías con el tema de los celulares robados. Concretamente, por lo que nos viene en mente ahora ya sucedió por Corrientes al 2100, Corrientes al 2300, Corrientes al 2400, Sarmiento al 2800… y por lo que vemos sigue ahora por el lado de Rivadavia. Además están haciendo allanamientos similares de otros barrios como Retiro.
Es importante ser consciente de que uno no debe comercializar productos de dudosa procedencia, comete un delito que fomenta el robo, del cual cualquiera de nosotros podría llegar a ser víctima.
U.K.